lunes, 14 de noviembre de 2011

Antes y después
                      (Sin Photoshop)


Una vez os hablé sobre cómo había influido el paso del tiempo en nuestras relaciones, lo que antes era difícil y bonito ahora resultaba ser fácil y muchas veces aburrido.

Pero el paso del tiempo no solo influye en la relaciones, sino en nosotros mismos como persona.

Ayer hablando con una amiga me di cuenta de cómo había cambiado mi vida en poco tiempo.

Desde que llegué a Londres, me he dado cuenta de que algo dentro de mí ha cambiado. Ya no me refiero a aprender a valorar las cosas más, como un día os conté, sino que he notado un cambio brusco en cuanto a mis prioridades en la vida.

Me he planteado que podría ser que simplemente he madurado algunos aspectos de mi vida. Pero tampoco creo que simplemente sea eso...

También he pensado que esta ciudad cambia a la gente. Es un ambiente más frio y responsable, donde todo es completamente diferente.

Otra de mis opciones, es que simplemente me estoy haciendo mayor. Me emociona escuchar canciones que me recuerdan a cuando era pequeña, lloro demasiado viendo pelis..

Me levanto, desayuno, me voy a clase, a trabajar, me hago la cena, recojo todo, veo alguna película y me voy a dormir. Eso es mí día a día. Supongo que ahora muchos de vosotros pensareis "Y el mío también".

Está claro que cuando terminas de trabajar, muchas veces solo te apetece llegar a casa y tirarte en al sofá. Pero ya no me refiero simplemente a eso, sino a que llega el fin de semana y lo que antes esperaba con ilusión, que era salir hasta las tantas y tomarme algunas copas, ahora ni siquiera me apetece.

He descubierto que me apetece hacer cosas distintas, que le doy más prioridad a descansar o a otras cosas, que a salir hasta las tantas.

Sea lo que sea, por un lado me proporciona estabilidad y seguridad. Pero por otro me da miedo pensar que nos estamos haciendo mayores. Algunos amigos ya se han comprado una casa, otros se han casado y han tenido hijos, y muchos otros se han ido a vivir fuera...

Antes estaba enganchada a las series Españolas de adolescentes y ahora cada vez me gustan menos, prefiero ver películas buenas o incluso algún documental.
Antes tenía miles y miles de amigos y ahora me centro en esos que valen la pena...
Antes odiaba pasear, y sin embargo ahora, me encanta.
Antes podía acumular en mi sofá la ropa de toda la semana y ahora, la arreglo toda al momento que me la quito.
Antes me enamoraba cada 5 minutos y ahora se perfectamente lo que quiero.
Antes hacía llamadas perdidas, ahora envio emails o llamo directamente.
Antes mi madre me obligaba a ver las noticias, y ahora las comento con ella.
Antes no valoraba un abrazo o incluso me daba verguenza decir "te quiero" a las personas que me rodeaban. También huía de las reuniones familiares  y sin embargo ahora, soy yo quién organiza cenas y comidas con ellos.

En fin, supongo que lo que queda es disfrutar y aprovechar esos momentos que realmente vale la pena...
 Todo pasa tan rápido...



1 comentario: